sábado, 12 de marzo de 2011

Razones para frenar antes.

Estás en auto. Ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires, casi da igual. Llega la esquina, llegás a la esquina? O frenás antes? Frenar, frenás, según dicte el semáforo, una senda peatonal o una vieja cruzando. Frenás. Pero a veces, y sólo a veces y por suerte a veces, frenás antes. A saber, si te acercás con tu coche a la esquina de Av. San Juan y 9 de Julio, por ejemplo, y ves a un che pibe amigo con una esponjita en la mano y un baldecito en la otra, frenás antes. En especial si el agua del balde con la cual pretende limpiar tu parabrisas se ve tan marrón como de costumbre. Pensás en decirle que no, gracias, en sostenerle la mirada con cara de amenaza, en esquivar la mirada para que ni te pregunte, en darle una moneda a cambio de que NO te preste el servicio, pensás al pedo. Nada funciona. Frenás antes.

Pero si la paranoia te gana cuando estás llegando a una barrera que casualmente te convierte la calle en ‘sin salida’… Te lo digo de vuel…? Frenás ant… No sea cosa que por alguna cosa de esas que pasa en las películas (y creés que también en tu vida real), tengás que salir rápido marcha atrás porque un contingente de coreanos armados te persigue y... Nah, te detenés antes de la esquina y doblás a la derecha antes de que…

Y con 36°C? Ni hablar, ni habl. Martes, 3 de la tard. 16 de ene. Qué importa el año. Sol que raja la. Semáforo en. Esquina, no árbo. Y a mitad de cuadra, un Ombú. Frenás. Antes. Bien sombra, bien.

Otras veces, para mi regocijo personal, sos como yo: ni siquiera tenés auto.

3 comentarios que comentaron.:

Luis López dijo...

Con tu permiso, seré asiduo de tu blog. Besos,

Unknown dijo...

me pareció bueno, lo seguiré viendo con frecuencia.

Luis Cortés G. dijo...

Qué notoria escritora de microrrelatos; qué buena música y qué buen blog. Desde ya me declaro seguidor de tu blog, Cecilia. Éxitos y saludos desde Venezuela!